“Levantémonos y llevemos el evangelio a toda persona sin favoritismos”. 1. Descendamos a los lugares que creemos más bajos, allí hay gente que esperan escucharnos y de quienes podemos aprender mucho (v. 24-33). 2-Hablemos a todos (en toda nación) lo único que no pueden dejar de escuchar, el evangelio de la cruz (v. 34-43). 3. Es Dios quien salva a los más viles pecadores (v. 44-48).